Kalamity muestra un despliegue de aromas, desde frutas rojas hasta notas animales, de violetas a trufa. Aromas que irán ganando complejidad en los próximos años. Un vino con gran persistencia y mineralidad
Los llamativos nombres y etiquetas expresan el aprecio de Oxer por Shakespeare. “Honi soit qui mal y pense” (que la vergüenza caiga sobre quien piense mal de esto) procede de la obra “Enrique III”.
Las mejores uvas de cada parcela se han seleccionado y vinificado de forma separa den barricas de roble francés, utilizando levaduras autóctonas. Tras 12 meses de crianza se decide el ensamblaje.
Nota de cata
Con un color rojo rubí intenso. En nariz, recuerda a frutas rojas con trufa. La madera está bien integrada y apenas se siente presente. En boca es complejo y elegante. Podríamos decir que es como seda. Con una acidez equilibrado y largo.